CONTEXTO EDUCATIVO

La historia de la Escuela Normal Superior Rebeca Sierra Cardona se puede narrar a partir de grandes acontecimientos o hitos que han marcado la vida institucional a la vez que le ha permitido posicionarse como institución formadora de maestros con una identidad propia reconocida en la región. Hace parte de la vida del municipio, de sus habitantes, de las organizaciones, anclada en la tradición y sujeta a  transformaciones y adaptaciones como que a ninguna otra institución del municipio le ha tocado verse enfrentada a tanto cambio y reafirmar constantemente su posición.

Estos acontecimientos se relatan desde la necesidad de crear la institución, los avatares políticos, la normatividad, el reconocimiento como normal rural, departamental y nacional, la diversificación de la educación, los nombres y apellidos con que la han bautizado, el proceso de reestructuración con la Ley 115, la nueva institución educativa con la Ley 715 y los procesos de verificación de la calidad del programa de formación complementaria con una mirada crítica de educación superior.

Contar como la  Escuela Normal Superior de Anserma Caldas surge en los albores de la década de los años 50, época de grandes tenciones políticas y sociales,  conocida por el País como época de la violencia. Nace una escuela normal y se cierra una de las normales de mayor tradición en Colombia: la Escuela Normal Superior de Tunja. Estos acontecimientos obligan a pensar y situar la institución dentro de este contexto para entender o analizar la situación educativa del País.

A pesar de estos acontecimientos, la institución inicia como escuela complementaria en el año 1951 y gracias al empeño y visión del alcalde Francisco García y la directora Fundadora Rebeca Sierra Cardona el 15 de Enero de 1953 mediante decreto 002 se crea la Escuela Normal Superior Rural de Señoritas de Occidente y se aprueban los estudios de 1º a 4º grado de bachillerato.

En el año de 1955 es reconocida como Escuela Normal Superior Rural departamental para señoritas del Municipio de Anserma según Resolución No.2511 del 27 de junio de 1955 y se gradúa la primera promoción de 9 estudiantes con el título de MAESTRAS RURALES.  Para 1963 era la Normal Nacional de Señoritas y otorgaba el título de MAESTRO SUPERIOR mediante Decreto No.1955 del mismo año.

Desde los primeros años de vida institucional la Escuela Normal Superior ha visualizado la formación de maestros dentro de los requerimientos de modernización del estado,  las necesidades sociales y las tendencias  educativas mundiales. Se trata de adaptar las condiciones externas e internas al currículo,  los planes de estudios de acuerdo al progreso de las ciencias y al desarrollo del país.

Entre el período de 1969 y a 1975 la Escuela Normal  Nacional de Señoritas era considerada como el centro educativo de más renombre en el municipio y de la región, los egresados se ubicaban laboralmente con facilidad en los centros educativos del sector rural y en la década de los años ochenta la escuela normal graduaba bachilleres pedagógicos y comerciales.

Al darse el proceso de reestructuración de las Escuelas Normales Superiores del País,  atendiendo a los requerimientos de la Ley 115 se gradúa la última promoción de Bachilleres Pedagógicos y Comerciales en noviembre de 1997,y ya no es la Normal Nacional de Señoritas sino la Normal José Manrique Gómez de Anserma Caldas, a partir del Decreto 3012 de 1997 comienza la reestructuración de la Escuela  Normal Superior de Anserma Caldas y sus egresados se titulan BACHILLERES ACADEMICOS CON PROFUNDIZACION EN EDUCACION Y PEDAGOGIA Y NORMALISTAS SUPERIORES.

La acreditación previa otorgada por el Ministerio de Educación Nacional  por resolución 2561 de septiembre del año 2000 marca otro momento importante en  la vida de la institución y en el año 2004 es acreditada en Calidad y Desarrollo por resolución 4090. En tanto su naturaleza de Institución Educativa Formadora de Maestros para el Nivel de Preescolar y Básica Primaria,  la Escuela Normal Superior sigue trabajando para responder a las exigencias internas y externas e incorporar las políticas que la mantengan en un nivel que corresponda a los requerimientos de la formación de maestros para el siglo XXI.